Y un 09 de octubre de 1979 jamás será olvidado por Juan Pablo González Arce a quien le fue asignado en su ingreso el número de carné 137, 42 años y 7 meses han transcurrido desde entonces, con incontables experiencias y aprendizajes en esta gran empresa.

Pablo González como la mayoría le conoce, se puede decir que trabajó únicamente para la CNFL, pues estuvo en otro trabajo tan solo 15 días, cuando le llamaron de la Compañía y dichosamente nos cuenta, que aprovechó la oportunidad de su vida.

Él ingresó a realizar unas vacaciones, estuvo primero como oficinista 1 pero gracias a sus ganas de hacer las cosas bien, a su dedicación y compromiso, continuó en la CNFL y rápidamente fue escalando puestos y recuerda con gran emoción cuando pasó a oficinista 4.

Estuvo en la Sección de facturación, Almacén Anonos, Proveeduría, Auditoría, Gerencia, Sucursal Guadalupe, Sucursal Desamparados, cuando era únicamente área comercial y vivió muchos de los procesos de automatización, con el Sistema Administrativo de Servicios Eléctricos, (SASE), para lo cual tuvo que trabajar fines de semana y madrugadas por falta de conocimiento para poder facturar los ciclos y cerrar facturación.

Fue parte de la implementación del Módulo de Atención al Público Automatizado, (MAPA), y del Sistema Comercial de Desconcentración (SICODE), cuando en la época comenzaron a crearse las sucursales y la automatización llegó a cambiar de forma electrónica los servicios que se ofrecían en máquina de escribir.

Luego llegó a la jefatura de la Contraloría de Servicios por unos 24 años hasta que el ICE decidió cerrar estas oficinas del Grupo para brindar un servicio más integral a través de Mercadeo y otras áreas que se distribuyeron las funciones.

Fue así como estuvo un tiempo dando soporte a la Gerencia, posterior a la jubilación de don Mauro Camacho (QDDG), don Sidney pasó a ocupar ese puesto y a Pablo González se le presentó la oportunidad de sustituirlo en la Sucursal Desamparados.

Estuvo por poco más de 4 años y sin embargo se retira muy satisfecho de su relación con el personal y de los logros alcanzados entre ellos, la mejora del periodo medio de cobro, lo que beneficia en gran medida los ingresos financieros de la sucursal y por ende de la CNFL.

Manifiesta que hay en él en este momento sentimientos encontrados por la llegada de su jubilación, agradece enormemente a los programas que brinda la Compañía de “Fortaleciendo el mañana” que nos preparan para este momento, y por último agradece a esta gran empresa y a Dios por la experiencia vivida.